Problemas de pareja
Problemas de pareja

Todos los conflictos de pareja tienen una causa, encontrarlos puede ser el primer paso para el mejoramiento de la relación y encontrar la forma de cómo solucionar los problemas de pareja es el primer paso, generalmente los motivos son más comunes de lo que piensas. En la mayoría de las relaciones sentimentales nos encontramos con crisis, las cuales una vez superadas, y de acuerdo a su grado de dificultad, se convierten en herramientas para enfrentar futuras dificultades. 

Por esta razón se hace indispensable reconocer las causas primarias de los conflictos. Puesto que, cuando nos encontramos con un punto de partida, se hace más fácil hallar las herramientas que nos ayudarán a salir de ellos y resolver los problemas de pareja.

Problemas de pareja más comunes:

Problemas de pareja más comunes:

A pesar de lo cliché que pueda sonar, muchos de los problemas en las relaciones de pareja son más comunes de lo que parecen y parten de la falta de:

1. Celos e infidelidad en la relación

El concepto de infidelidad trae celos, pero estos no son amor, sino obsesión por la posesión de otra persona. Restringir la libertad de nuestra pareja es un espiral que conduce al fracaso del matrimonio a la hora de elegir con quién deberíamos estar.

Partimos de la premisa: hay contratos en pareja, estos son implícitos (no se dicen), y se relacionan con el entorno social y cultural. Es decir, se constituye de esta forma, solo porque se encuentra ubicada en determinado contexto. Entonces se puede inferir que uno de los contratos será la lealtad. Salvo aquellas parejas que deciden llevar una relación abierta de manera voluntaria.

La dinámica entre los celos y la infidelidad es compleja y no desaparecerá de la noche a la mañana. Sin embargo, tenemos el poder suficiente para cambiar nuestras percepciones y tomar decisiones que contribuyan a la felicidad y tranquilidad. Recuerda siempre que las heridas del corazón pueden curar, pero el tiempo no se recupera.

2. Falta de tiempo, desatención y monotonía en pareja

En muchos casos, la falta de tiempo y los malos hábitos en pareja, desencadenará en situaciones que afectarán el normal desarrollo. Las agendas apretadas y la monotonía son una realidad que aquejan las relaciones, y hacen que se distancien, pero esto no significa que no puedan compartir tiempo juntos, porque siempre hay una manera de hacerle frente a las dificultades.

Si se conocen bien, definen espacios relacionados con su vida, priorizan y toman decisiones conscientes. Realizan actividades juntos, comparten aficiones, e incluso hablan de sus problemas, etc., la pareja no se verá afectada por la falta de tiempo y la rutina. Si esto no es suficiente, vale la pena probar la terapia de pareja.

Si los espacios no alcanzan para disfrutar la relación, no dejes que la rutina se alíe con ellos. Por lo tanto, evita repetir actividades aburridas, como ir al mismo restaurante o cenar en el lugar habitual, ir al cine a menudo o hacerlo todo igual una y otra vez.

La idea es conocer y probar nuevos sitios para suplir la falta de tiempo mediante actividades combinadas llenas de motivación, pueden hacerlos sentir felices.

3. Dificultades sexuales en los problemas de pareja

El sexo es un campo importante para los seres humanos que cambia y se desarrolla a lo largo de nuestra vida, incluido el comportamiento sexual, las relaciones y la intimidad.

Para las parejas es un aspecto fundamental, que debe trabajarse todo el tiempo. La exploración, conocerse a sí mismo y a tu par es esencial, para lograr una sexualidad placentera.

Si tus problemas de pareja comunes están relacionadas con este aspecto, no debes esperar a que el tiempo lo resuelva; porque termina haciendo el efecto contrario: y pueden ir creciendo, causan cada vez más mella en la relación.

A mediano y largo plazo, la insatisfacción sexual en ocasiones conduce a depresión, baja autoestima, alienación de la pareja, infidelidad y, en algunos casos, ruptura.

4. Falta de un proyecto de vida en común, futuro incierto

Muchos de los conflictos de pareja se relacionan con la ausencia de planes a futuro, ya que puede interpretarse como falta de compromiso, sueños y metas a largo plazo. La relación tiene y debe plantearse un proyecto de vida, pues esto es lo que brinda esperanza y proyección a largo plazo en pareja.

Si dice amarte, pero es un amor superficial, sin ningún empuje o planificación, tiende a generar desconfianza e inestabilidad en una de las partes, es ahí donde surgen los conflictos.

Está claro que la vida se debe vivir con serenidad, no obstante la pasividad no es una opción y esto genera rupturas.

5. Problemas de convivencia y reparto de responsabilidades

Algunas relaciones estables se deterioran por la convivencia y falta de trabajo en equipo. Esto se da por la falta de reglas, normas y pautas básicas en el día a día que no se han establecido.

Otro factor es la idealización de la vida en pareja, por no tener en cuenta que no son unas vacaciones o algunas horas al día, es vivir de un todo y por todo con la otra persona, con sus defectos, manías, cualidades y virtudes. Dos personalidades unidas en un espacio.

Lo ideal es tener en cuenta que es un lugar para los dos, la distribución de las responsabilidades en fundamental y la pauta es hacerlo con equidad, la igualdad es un término o punto al cual es difícil llegar.

Es un trabajo en ocasiones a largo plazo, ambos están aprendiendo a compartir el espacio. Es importante que respetes y valores al otro, cada uno debe poner de su parte.

6. La falta o mala comunicación en pareja

La buena comunicación en pareja es un pilar crucial de la relación, los hará estar más conectados. Pero deben tener en cuenta que son dos puntos de vista diferentes y ser objetivos puede ser complejo. Ambos tienen una forma de ver y entender el mundo, lo vital es lograr un punto medio.

Si tu relación no está basada en el diálogo, la empatía y el respeto, es muy difícil comunicarse de manera asertiva. A los seres humanos nos gusta sentirnos escuchados y comprendidos, es una necesidad esencial para el bienestar emocional.

Deben trabajar en lograr un lenguaje común y efectivo, expresarse con honestidad, siendo directos, cuidar el lenguaje no verbal, recuerda que todo comunica y cualquier detalle puede desencadenar en el fin de la relación.

7. Diferencias en las opiniones y valores fundamentales

En las relaciones las diferencias de opiniones o valores es muy usual, desde que estas no superen los límites, pueden beneficiarlos a ambos. Cuando eliges tu pareja es clave fijarse en los valores, lo que es importante para uno y el otro, si están de acuerdo en diferentes temas, porque a la larga esto marcará las dificultades.

La crianza, creencias y educación de cada uno, será determinante para que todo fluya, es posible que no sean iguales, lo valioso es llegar a un punto medio y respetar al otro por lo que es, su historia personal y vivencias, son la clave para un matrimonio estable.

En ocasiones las diferencias llegan a enriquecer la relación, pero cuando se obliga a renunciar a estas, todo deja de fluir y se presentan los conflictos, ten muy presentes los valores en el amor.

8. Los eventos traumáticos afectan la relación

Los eventos traumáticos se pueden presentar en cualquier momento de la vida y puede ser para ambos o un miembro de la pareja. Esto deriva en una crisis en la relación por no saber manejar el tema, afectando el bienestar emocional de los dos.

Si este es tu caso, lo más recomendable es acudir a terapia con un profesional de la salud mental. El psicólogo te brindará herramientas a ti o a ambos para sobrellevar la situación y salir a flote como pareja, superando los obstáculos.

9. Problemas fuera de la pareja

Si bien las parejas conviven una gran parte del tiempo, no se debe desconocer que cada uno de sus miembros tiene una vida aparte de su relación de pareja, es decir: un trabajo, un grupo social y familiar.

En ocasiones cualquiera de estas áreas puede verse afectada por algún contratiempo y causar problemas comunes en la pareja. Ya que los seres humanos en la gran mayoría de los casos nos cuesta separar los diferentes ámbitos de la vida, lo importante aquí, es que no traslades tus problemas a tu relación de pareja. Si no más bien te apoyes en tu compañero y que este te pueda servir como soporte y alivio y no que se convierta en una dificultad más.

10. Problemas con la familia de la pareja

Es muy usual ver que muchas parejas no se llevan bien con la familia de sur ser amado, esto se debe a que pueden tener estilos de vida diferentes, ideologías, caracteres, entre otros.

Lo más recomendado en este caso es impartir límites entre ambos bandos, intentando que perdure siempre el respeto y que la familia en general entienda que decidiste compartir tu vida con esa persona, ya sea que estén de acuerdo o no y que se mantengan al margen de la relación.

11. Dificultades económicas

El dinero es un factor que interviene de una forma relevante en la pareja, al final es un componente que brinda tranquilidad, estabilidad y bienestar. Sin embargo, nadie está libre de atravesar una etapa económica difícil en la vida.

En momentos de dificultades económicas lo que debe primar en la pareja es la unión, la tolerancia, el entendimiento. Saber que es solo es un mal momento y que tarde o temprano tendrá solución. Lo más recomendado para no dejar que esta situación afecte tu relación es estar en comunicación continua, buscar soluciones entre ambos, brindarse apoyo mutuo y no dejar que el dinero acabe con el amor.

12. Hijos

Los hijos son el tesoro de sus padres, son los más queridos y amados de manera incondicional, con su llegada el hogar se llena de amor, gratitud y alegría. Pero en muchas ocasiones también pueden ser motivo de discrepancia, las personas han sido criadas de diferentes maneras y cuando se tienen hijos muchas de esas creencias son proyectadas en ellos, lo que puede llevar a tener puntos de vista diferentes, de cuál será la mejor educación.

En esta etapa de la relación es importante tener muy claro de qué forma determinarán la crianza de su hijo. Por ello no se desautoricen, es un error gravísimo, hablen a solas, creen acuerdos y normas en común.

Donde ambos se sientan satisfechos y de esta forma poder darle una crianza a su hijo sana, firme y llena de amor.

13. Dependencia emocional

La dependencia emocional siempre será una manera tóxica de llevar una relación. Es relevante reconocer que una pareja está conformada por dos personas, lo que significa que esa persona hace parte de tu vida, más no es tu vida entera.

Recuerda que antes de tener a tu pareja tenías una vida, así que intenta más bien complementar tu vida, incluyendo tu pareja. Pero no dejes de hacer las cosas que te gustaban, o a tus amigos, familiares, solo por dedicarle todo tu tiempo a tu pareja. Esto tarde o temprano los terminará ahogando y puede causar problemas muy graves, tanto en la autoestima de ambos, como de la relación en general.

14. Idealizar a tu pareja

Idealizar una persona es ver las virtudes de esta, incrementada, es creer que no tiene defectos, que todo lo que hace está bien, sin importar si te causa daño o no.

El idealizar una persona va muy de la mano, con una baja autoestima por parte de quien idealiza, además que va creando dependencia emocional.

A largo plazo esto puede traer muchos conflictos en la relación, ya que se va volviendo absorbente y dependiente, lo cual no es para nada sano, así que lo más significativo es que trabajes en incrementar tu autoestima y amor propio.

Disposición y motivación para mejorar en pareja: 

En las relaciones de pareja el panorama catastrófico no ayuda mucho, puesto que pensar en acabar la relación, antes de haber hecho lo propio para mejorarla o solucionar la dificultad, puede dejar una sensación de frustración y ocasionar más problemas.

No obstante, la motivación para mejorar y la disposición para hacerlo, hablan del compromiso que pueden tener ambos miembros y constituye en sí mismo una apuesta por mejorar la relación.

Teniendo siempre presente que cada miembro debe realizar cambios en su conducta, y partiendo de esta premisa se debe contar con la mayor motivación: el amor.

Los problemas de pareja son como un Iceberg

Como resolver los problemas de pareja

La realidad de los problemas de pareja podría compararse con un iceberg, donde solo un pequeño porcentaje es el que sobresale en el mar. Pero realmente la parte que está sumergida puede llegar a ser enorme, mucho más grande que la parte visible al ojo humano.

Por eso es fundamental identificar las causas más profundas y contundentes, que influyen para que se esté presentando un conflicto con nuestra pareja.

Una vez identificados estos elementos se buscan estrategias para solucionar los problemas que permitan el fortalecimiento de la pareja.

A continuación, te compartiremos una serie de consejos para solucionar los conflictos de pareja más comunes.

Errores de la comunicación en pareja

6 consejos de cómo solucionar los problemas de pareja

1. No exijas aquello que tú no das

En las relaciones de pareja un punto crucial es el equilibrio, es como cuando hablamos de una balanza, es intentar que los puntos de vista, ideas o pensamientos de ambos se mantengan en el punto medio.

La balanza no debe pesar más para un lado que para el otro, sino estar casi en equilibrio. Es por esta razón, que en ocasiones exigimos a nuestra pareja que nos dé algo que sentimos, que nos hace falta.

Por ejemplo, si yo le digo a mi pareja que me hace falta que pase más tiempo conmigo, lo primero que debes revisar es que tanto tiempo de calidad le brindas tú a tu pareja.

No se trata de decir cómo tú me das y yo te doy, pero si se trata de reciprocidad, es algo fundamental en la pareja. Entonces, cuando requieras o exijas alguna característica en particular a tu pareja, primero analízate tú y observa la situación.

Después reflexionen y dialoguen entre sí, para llegar a puntos medios y solucionar esos problemas de pareja comunes.

2. Una discusión no se gana

Una discusión es un debate que se crea entre dos o varias personas, donde se plantea un tema específico y se intercambian opiniones, casi siempre opuestas.

¿Cuál sería el fin de una discusión de pareja?

Es precisamente expresar sus puntos de vista, sus opiniones, así estos sean diferentes. El hecho de que yo piense algo donde el otro no este de acuerdo, no significa que sea mejor o peor, simplemente es mi punto de vista y, por tanto, debe ser respetado.

Cuando en las parejas las discusiones son muy recurrentes, pero no se le suele dar el enfoque de debate, sino más bien de pelea, de luchar hasta el final por ver quién tiene la razón. Es una conducta que puede traer grandes problemas en el ámbito de pareja.

Recuerden que un punto medio siempre es ideal y si definitivamente observan, que no logran llegar a acuerdos. Expongan cada uno sus argumentos y traten de solucionar la discusión para no generar conflictos y problemas innecesarios en la pareja.

3. Ponte en los zapatos de tu pareja

Las relaciones de pareja son de DOS, por tal motivo es importante que exista una comprensión y complicidad en cualquier ámbito de la relación.

Si tu pareja se siente mal por alguna circunstancia que esté atravesando en su vida, apóyalo, no lo juzgues. No todos los seres humanos somos iguales y tal vez aquello que no te afecte emocionalmente a ti, para tu pareja si pueda ser representativo.

Ser empáticos y lograr ponernos en el lugar del otro, de alguna manera nos garantizará unas buenas relaciones interpersonales. En el caso de las relaciones de pareja ideal, ayudará a fortalecer la relación y evitar problemas comunes o hallarles una solución.

4. Expresa lo que sientes

Muchas personas casi nunca dicen lo que sienten o piensan por evitar una pelea o enfado con sus parejas.

¿Pero crees que esta es una forma adecuada de solucionar situaciones negativas en la pareja? La respuesta es NO, siempre; aun así, debemos expresar todo aquello que opinamos y sentimos. Comunicarnos y saberlo hacer de una manera asertiva es un factor fundamental en cualquier relación.

Reitero, expresar todo lo que sentimos, pero de una manera adecuada, es decir, que sea de un modo propositivo y respetuoso; a su vez que sea directa. Hablar de manera clara con la pareja ayudará a fortalecer la relación y cada vez se presentarán menos problemas.

Las parejas que no logran comunicarse, son parejas menos fuertes, son personas que cuando se presenta los problemas, no saben cómo resolverlo o les cuesta mucho solucionar la situación, uno de los motivos más comunes en las consultas de pareja.

Porque no cuenta con la estrategia de comunicación, así que habla con tu pareja, acerca de todo aquello que les gusta y lo que no, establece límites en la relación. Recuerda que tu pareja es tu compañero de vida.

5. Hablar en el momento adecuado

Identifica cuál puede ser ese momento adecuado para expresar a tu pareja todo aquello que no te hace sentir bien. Espera a que te encuentres tranquilo para hablar, el enojo es un pésimo compañero cuando queremos decir aquello que sentimos.

Así que tomate un tiempo, es mejor hablar desde la razón, desde la tranquilidad y con la cabeza fría. Hablar desde la ira con nuestra pareja, puede hacer que luego nos podamos arrepentir de todo lo que dijimos y causarnos más problemas y no solucionar nada.

6. Buscar ayuda profesional para los conflictos de pareja

Hay conflictos que definitivamente no sabemos resolver como parejas, por eso la mejor opción es buscar la ayuda de un profesional especialista en esta área.

En la terapia de pareja les ayudarán a llegar a acuerdos, a buscar soluciones en conjunto, para remediar la situación y no dejar que la relación se pueda deteriorar por esta razón.

En Hakuna Psicólogos contamos con excelentes especialistas en terapia de pareja. Así que, si sientes que tú y tu pareja, tienen problemas que no saben cómo solucionar y que a causa de esta situación su relación cada día se deteriora más, llámanos y ponte en nuestras manos.

Erica M. Montoya Londoño

Psicóloga y Psicoterapeuta, Especialista en Psicología de la Actividad Física y del Deporte, Magíster en terapias de tercera generación. Directora de Hakuna Psicólogos en Medellín.